EUROPA
PRESS
13 abril
2021
¿Han
aumentado los casos de halitosis durante la pandemia?
El odontólogo Agustín Soria, del
Servicio de Cirugía Maxilofacial y Odontología del Hospital Nuestra Señora del
Rosario, advierte de que, durante la pandemia y debido al uso continuo de la
mascarilla, están aumentando de forma considerable las visitas a la consulta
por halitosis, que en la mayoría de los casos ya existía previamente, pero que
no se sentía de igual manera al no llevar anteriormente cubierta la boca de manera
duradera.
La halitosis, que se define como un olor desagradable que
procede del aliento de una persona y que proviene de la boca, la cavidad nasal,
los senos paranasales o la faringe, es más común de lo que pudiera parecer. De
hecho, es la tercera causa de consulta al odontólogo y su prevalencia, que es
muy variable al no haber criterios diagnósticos que la definan, se estima entre
el 22 y el 50 por ciento de la población. Según comenta el doctor, "puede
acabar generando en quien la padece falta de confianza, inseguridad, vergüenza
o, incluso, causar ansiedad".
Diagnóstico
Como detalla el jefe de Servicio de Hepatología y
Gastroenterología del Hospital Nuestra Señora del Rosario, el doctor Gerardo
Clemente, la mejor técnica para efectuar el diagnóstico de la halitosis es el
olfato, que se conoce como método organoléptico. El paciente debe abstenerse
del consumo de ajo, cebolla y comidas picantes en las últimas 24-48 horas a la
realización de la prueba.
"Si percibimos que el mal olor proviene de la boca,
habrá que pensar en una enfermedad periodontal; si, por el contrario, procede
de la nariz, mientras el paciente permanece con la boca cerrada, será más
sugestivo de una enfermedad extrabucal", aclara este experto, quien
también apunta que hay otros sistemas de medida más sofisticados como son,
entre otros, la cromatografía gaseosa, que detecta los compuestos volátiles del
sulfuro (CVS), y el monitor portátil de sulfuro, que analiza el contenido total
de sulfuro en aire espirado.
Causas del mal aliento
Las causas de la halitosis son diversas, aunque la más
frecuente es la patología bucal. "Su presencia se relaciona con la
descomposición de partículas de alimentos, células, sangre y algunos
componentes de la saliva, que da lugar a la emisión de derivados sulfúricos
volátiles y otros gases que provienen del aumento del número de bacterias
anaerobias Gram negativas, aunque en estadios iniciales, microorganismos Gram
positivos pueden estar involucrados. En el 80-90 por ciento de los casos, están
implicados gérmenes de la cavidad oral", apunta el doctor Clemente Ricote.
El doctor Soria, por su parte, añade que el mal aliento
tiene que ver con ciertos alimentos (ajo, cebolla, especies), hábitos (tabaco,
alcohol, café, mala higiene), así como medicación y enfermedades (boca seca o
xerostomía, respiradores orales, infecciones, heridas, caries, patología de
nariz, garganta, amígdalas, senos paranasales y reflujo gastroesofágico).
En la mayoría de los casos, el mal aliento mejora con una
higiene bucal (dientes, encías y lengua) adecuada y constante, pero es
conveniente seguir ciertos consejos prácticos que ayudan a prevenirlo. Estos
son los que apunta el doctor Soria: evitar el alcohol, el café y el tabaco,
dado que provocan la deshidratación a nivel de la saliva; hidratación abundante
(beber un litro y medio de agua diariamente); alimentación adecuada, y comer
cada cuatro horas; evitar las dietas hiperproteicas, hipocalóricas y las
comidas ricas en grasas; evitar alimentos con sabores fuertes o que contengan
condimentos olorosos; consumir chicles antimicrobianos y/o probióticos y evitar
respirar por la boca.
"Si estas pautas no acaban de resolver el problema, es
conveniente consultar con tu dentista o médico para descartar una patología más
grave", concluye el doctor Soria.